02/05/2022
Jugó de ocho en el famoso equipo multicampeón, que ganó cuatro títulos seguidos con dos campañas invictos. Gracias a José y sus compañeros, hoy somos La Gloria. Su hijo Jesús, recuerda aquel espectacular equipo.
José Lizondo nació en Córdoba Capital en 1903, llegó a Instituto a los 17 años: “Mi padre siempre vivió en Alta Córdoba e inicialmente en barrio La Cruz, empezó a jugar en 1920, de ocho. El además trabajaba en el Ferrocarril”, cuenta su hijo Jesús, hincha fanático de Instituto.
José jugó 9 temporadas en Instituto, disputó 73 partidos y marcó 37 goles. Fue un eslabón fundamental para la obtención de los títulos oficiales de 1925, 1926, 1927 y 1928. También ganó el Sidral 1929. Gracias a Don José y sus compañeros, hoy somos “La Gloria”.
Jesús recuerda aquel once ideal sin titubear y lo nombra de corrido: “El equipo formaba así: 1-Tapia, 2-Ortiz, 3-Pacheco, 4-Saldaño, 5-Devoto, 6-Castañares, 7-Cepeda, 8-Lizondo, 9-Benavidez, 10-Fernández, 11-Pedrotti. Una verdadera maquinita. Con enganche y tres delanteros”. Hubo varias formaciones, pero la base se sostuvo en esa época Gloriosa.
Los nombres de los jugadores gloriosos de la década del 20: José María Lizondo, Pedro Saldaño, Manuel Zárate, Bernardo Fernández, Atilio Pedrotti, Rosendo Cepeda, Félix Pacheco, Pedro Ortiz, Benavidez, Roberto Gauna, Roberto Devoto, Miguel Monteros, Luis Castañares y Tomás Tapia.
Sus actuaciones causaban admiración y respeto en todas partes. No solo en el la competencia local, también en amistosos con clubes porteños y del interior. Como ante Newell’s Old Boys, con un 4 a 2 en Rosario en 1927. O en 1928, contra Central Córdoba en Rosario contando entre sus filas con el mítico Gabino Sosa, La “Gloria” le ganó 5 a 2. Además obtuvieron la Copa Gath y Chaves, venciendo a Talleres 4 a 1 en 1928.
En 1925 inició aquel camino triunfal, fue cuando ganaron el primer campeonato oficial de fútbol de la Liga Cordobesa. Siendo campeón invicto. Con 20 puntos en 12 partidos.
En el año 1926, al llegar a la 13a. fecha, se hallaban a 5 puntos de Talleres, pero con 3 partidos menos disputados, con motivo de que tres de sus mejores jugadores integraron un seleccionado argentino.
Estaban de gira en Brasil, Pedro Ortiz, Roberto Devoto y Bernardo Fernández. Y fue otra campaña sin derrotas y con el segundo campeonato al hilo.
Instituto obtiene también el campeonato de 1927. En 16 cotejos ganó, 10 empató 5 y perdió 1, marcando 39 goles a favor y 17 en contra. Jugaron un desempate ante Talleres y lo vencieron 4 a 1, logrando el título.
Y llegó el cuarto en fila para Instituto, al ganar el título en 1928. Superó por 7 puntos al segundo en la tabla. De 16 partidos obtuvo la victoria en 14, empató 1 y perdió el restante: “La prensa, en aquella época, los denominó como ‘Los Gloriosos'”, expresa con una sonrisa Jesús.
Y añade una linda anécdota que narra Jesús: “Uno, capaz por mi edad de 12 años y ser un niño, no tomaba dimensión de lo que pasaba en la ciudad y el país con esa escuadra. Y con mi viejo. Recuerdo que cuando ibamos al centro, la gente lo paraba. Y nos paraban gente con negocios. Nos hacían entrar y le regalaban hasta trajes. Fue muy lindo”.
Aquel equipo “Los Gloriosos” quedó en la memoria de todos, y gracias a ellos, hoy somos “La Gloria”.