20/12/2022
Tiene 18 años, juega de delantero en la Quinta y está en la Reserva que dirige Daniel “Miliki” Jiménez. El catamarqueño que festeja los goles zapateando Malambo, sueña con llegar a la Primera y poder ayudar a su familia.
Agustín Adrián Páez es delantero, tiene 18 años, y nació el 16 de junio del 2004 en Nueva Coneta, provincia de Catamarca. Su posición en la cancha es extremo por izquierda y falso 9. Actualmente vive en la pensión, en el predio La Agustina.
Agustín llegó de Catamarca a principio de año: “Estoy en el club desde marzo de este 2022. Mi llegada se da por parte de mi representante Mauricio Pérez, que me trajo a unas pruebas al club dónde tuve la suerte de quedar”. narra el delantero.
“Mi familia se compone por papá y mamá. Somos seis hermanos y yo soy el mayor de ellos. También tengo a mi abuela de parte de madre y a mi abuelo de parte de padre”, cuenta el pibe.
La Selección Argentina es campeona del Mundo y una de las estrellas, el ‘Fideo’, es referente de Agustín: “Un jugador que me gusta en mi posición es Ángel Di María, también me gusta Mbappé el francés. Son dos jugadores extraordinarios”, relata el futbolista de la cantera gloriosa.
Pero claro, inmediatamente se le dibuja una gran sonrisa cuando nombra al astro argentino: “Un jugador que me parezca un verdadero crack sin ninguna dudas es Lionel Messi”, dice Agustin.
Y añade mas elogios sobre el diez argentino: “Me parece un crack, en todo sentido un jugador diferente. En lo personal y en lo futbolístico, es un gran ejemplo a seguir por su humildad”, dice.
Agustín quiere volver a “agarrar” los libros, mientras hace lo que más le gusta, jugar a la pelota: “Tengo el Primario completo y si Dios quiere el año que viene voy a retomar el Secundario para poder terminarlo”,
Durante la temporada 2022, se pudo ver a Agustín festejar con una linda particularidad, zapateando folclore, más precisamente Malambo: “Aprendí a bailar folclore cuando era chico. Mi papá me llevaba a una academia. Porque de dónde yo vengo, de Nueva Coneta, en Catamarca, se escucha y se baila mucho esta música”. dice con orgullo el delantero albirrojo.
Agustín Páez vivió con mucha emoción la final del Reducido que devolvió a Instituto a la Liga Profesional.
Los deseos de Agustín para lo que se viene: “Mi sueño es jugar y poder debutar en Instituto; y obviamente todo jugador sueña con algún día vestir la celeste y blanca en un Mundial. Un sueño propio que tengo sería poder ayudar a mi familia, porque de dónde yo vengo somos muy humildes, ese sería mi gran sueño…”.
¡Que se te cumplan todos, Agustín!
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