02/06/2020
El diez de potrero que tiene Instituto. El que los hinchas extrañan en estas épocas de pandemia sin fútbol. Y que deja un mensaje a los gloriosos: “Solo agradecerles por el cariño que me dan”.
Damián Arce se ganó el cariño de los albirrojos, su buen pié y entrega es reconocido por el volante que firmó el año pasado por dos temporadas con La Gloria: “Gracias a Dios llegué a Buenos Aires, más que nada por la familia y porque estaba complicado para poder entrenar por las dimensiones del departamento en Córdoba”, cuenta el diez.
Su encuentro con su querida madre: “Como siempre, hermoso encontrarme con mi vieja, que al estar cerca es otra cosa. Nos podemos ayudar entre todos y están más tranquilos de que estemos acá”, cuenta el diez.
Su familia está bien y a Damián lo hace feliz: “No hay nada como estar en casa, a pesar de todo lo que está pasando Yo estoy bien, haciendo la cuarentena y tratando de cuidarnos lo más que se pueda, esperando que pase todo esto, para poder volver a Instituto”, narra el enganche albirrojo.
Los días pasan y hay que seguir esperando por la vuelta al fútbol y a la rutina: “Se extraña todo. Extraño los días previos al partido, esa adrenalina antes de jugar y a mis compañeros. Extraño mucho a Instituto”, reconoce Damián.
“Lo más dificil de esta cuarentena fue tomar la decisión de venir a Buenos Aires”, dice el diez.
El agradecimiento a los hinchas, que le hacen saber el cariño que le tienen: “Me cuentan, no tengo muchas redes, pero siempre me llega lo que comentan los hinchas de Instituto, y la verdad me pone muy feliz, se siente el cariño y eso es muy importante. Para el hincha de Instituto solo agradecerle todo el cariño que me dan”. Damián Arce, el diez de La Gloria.