Franco Tomaselli: “Sufro de lejos, y cuando voy a la cancha me da alegría”

10/10/2020

Es presidente de Unión de Morrison, de niño vivió en Alta Córdoba y es hincha y socio de Instituto. Su hijo Tristán es muy hincha de La Gloria y su hija Carla es fanática del básquet albirrojo.

Franco Tomaselli tiene 47 años, nació en Córdoba Capital y se crió en Alta Córdoba: “Vivíamos en la calle Sarachaga, en un edificio de tres pisos muy cerquita de la Plaza Rivadavia. Soy hincha y socio de Instituto. Luego nos mudamos a Poeta Lugones. En Alta Córdoba recuerdo que mis viejos trabajaban mañana y tarde, nos cuidaba Juana que estaba casada con ‘Cacho’, que trabajaba en el ferrocarril. Prácticamente nos criaron, eran fanáticos de Instituto. ‘Cacho’ aun vive en el barrio, aun tengo pendiente ir a visitarlo”.

Amor por la camiseta: “Aquí por Bell Ville estamos nucleados en la Filial Kempes – Curioni, la integran muchos de los pueblos aledaños a Bell Ville. Obviamente incluido Morrison. Siempre nos acomodamos para viajar a ver los partidos de la Gloria”, cuenta Franco.

“Yo soy ingeniero agrónomo. Me recibí en la Universidad Nacional de Córdoba. Me salió un trabajo en Morrison y desde hace 22 años. Me casé con Cecilia, tengo dos hijos que son Tristán y Carla, que estudian en Córdoba, en la Universidad. Mi hijo es muy hincha de Instituto. Mi hija es fanática del básquet. Ha ido a ver partidos sola al Sandrín, de la Liga Sudamericana”, narra Franco.

Como llegó a ser presidente de Unión de Morrison: “Hay muchas fuerzas vivas no gubernamentales, los colegios, los jardincitos, los bomberos. Está la cooperativa de obras públicas. Los clubes tienen sus comisiones. Siempre en alguna participás. Yo iba ver a Unión hace bastante. Empecé a participar en el club, me sumé a la Comisión Directiva, primero como vice y luego como presidente”.

“Te quita tiempo pero te da muchas alegrías. El simple hecho de volver del campo y ver un entrenamiento en la semana de los chicos fútbol infantil. Ver a una niña en Patín Artístico. O el año pasado que salimos campeones dos veces y ascendimos. Fui uno de los que promovió el fútbol femenino que me encanta. Unión es una institución pilar en Morrison y eso te da muchas energías”, dice Franco.

El vinculo con la directiva de Instituto: “Mi relación con la dirigencia actual del club nace con la llegada de Mateo (Bajamich) a Instituto, un día fuimos a una práctica y nos atendieron de manera muy amable. Allí comenzó una buena relación. Nos hemos cruzado incluso en partidos de visitante como por ejemplo en Rafaela. Siempre nos han recibido muy bien, siempre nos han cumplido”, narra Franco.

“Es una oportunidad linda para Mateo. Creo que va a un lugar (Houston) en donde seguramente demostrará lo que puede dar. La venta para nosotros será un antes y un después. Ese dinero nos permitirá seguir teniendo el club abierto. Hay una gran incertidumbre económica. Tenemos 150 juveniles que van a entrenar más los de la Primera, más fútbol femenino, también Patín, Vóley y Cesto que entrenan en el gimnasio”, relata Franco.

Franco no oculta su gran cariño por Instituto: “Yo siempre digo que hay una forma de medir cuanta pasión tenés por algo y es como afecta tu estado de ánimo. A mí Instituto me lo afecta claramente. Parece irrelevante y loco para el resto de la gente pero para los que lo llevamos adentro a ese sentimiento si tiene sentido”.

La opinión de Franco sobre Instituto: “A mi me gusta el perfil del club, multidisciplinario, con inferiores, chicos y chicas que tienen expectativas en muchas actividades. La pileta, La Agustina, lo que se está haciendo con el básquet que es un orgullo y es impresionante. Me siento orgulloso de Instituto. Sufro de lejos, y cuando voy a la cancha me da alegría”, cuenta Franco.

“Poniéndome reflexivo no es lo mismo administrar un club como Unión de Morrison a un club de la dimensión de Instituto. Admiro la gente que tiene el coraje de ser exitosos en sus rubros privados y que se meten adentro de un club a gestionarlo. Y hacerlo con seriedad. Uno entiende las redes y que una derrota duele. Pero hay que meterse en ese cuero”. Franco Tomaselli, un Fanático de la Gloria.