11/08/2020
Su abuelo llegó de España y se instaló en Alta Córdoba en 1940, de allí hasta la actualidad Instituto fue la gran pasión de su familia. Hace 40 años que va al mismo sector en el Monumental.
La Glo es pasión, es familia, es el barrio, sus filiales esparcidas en todo el mundo, es la Plaza Rivadavia, los colegios que rodean el barrio, es los murales que envuelven al Monumental y el calor de su gente.
La historia de Gonzalo Fernández: “Mi abuelo, Daniel Fernandez o Lelo para nosotros, es argentino pero hijo de españoles. El se instala en Alta Córdoba por los años ’40, vivieron toda su vida a 3 cuadras de la cancha sobre la ex Peral, hoy Fray José León Torres”, narra el glorioso
“Mi viejo, Daniel Fernández, mis tíos, mis primos y los hermanos y cuñados de mi abuelo, todos son de Alta Córdoba, se juntaban en lo de mi abuela Lela todos los domingos”, cuenta Gonzalo.
Almorzar en familia y luego a la cancha: “Se jugaba fijo 15.00 hs o 15:30 y de ahí después de comer los tallarines nos íbamos todos caminando a ver el partido. Yo habré empezado a ir a los 4 o 5 años, siempre sobre los hombros de mi viejo”, dice Gonzalo.
“Nos poníamos todos en la Popular en el codo con la Preferencial. Eramos unos 20, mínimo. Mi abuelo, mi viejo y mi hermano mayor (ya fallecidos) íbamos todos los domingos. Hasta supimos viajar varias veces con la hinchada”, cuenta sobre la presencia de su familia en el Monumental.
Y agrega: “Recuerdo una vez en Tucumán Vs. Atlético que el clima estaba pesado. Después tengo un hermano menor al que le llevo muchos años, que puedo decir que le transmití yo el fanatismo, al punto que lo hice jugar en las inferiores, primero al fútbol y después al básquet, deporte que es profesional en la actualidad. Siempre que está en Córdoba vamos si o si a la cancha y ahora el mayor placer es transmitirle esto a mis 3 hijos varones. Los dos mas grandes, Facu y Gaspar, ya los llevo a la cancha cada vez que puedo y si, en el mismo lugar que hace 40 años”.
“Y al mas chico, Bernardo, de 1 año y medio, en cuanto vuelva el fútbol va de una. O sea 4 generaciones de hinchas albirrojos. Por razones laborales me ha tocado no estar en Córdoba algún partido, pero sea como sea lo veo, lo escucho o lo sigo por Twitter, pero el horario cuando juega Instituto no se negocia”. Gonzalo Fernández, una historia llena de Gloria.