17/09/2020
Por la tarde estamparon la firma de la extensión de sus contratos y sus sueños se siguen haciendo realidad con La Gloria.
Nicolás y Franco, hijos de Sergio Watson, un reconocido jugador, son de barrio Centro América, de un hogar que respira fútbol, y donde también viven sus hermanos Thiago y Bautista, que juegan en las inferiores de La Gloria.
Pasaron la cuarentena jugando a la pelota en el pasillo de su casa todos juntos, esperando que pase el confinamiento por la pandemia. Hoy, luego que el llamado del club para la extensión de sus contratos, firmaron hasta junio del 2022.
La palabra de Nico: “La verdad que muy feliz por una nueva oportunidad y seguiré trabajando para devolverle al club todo lo que hace por mí. Es algo muy lindo que con mi hermano podamos seguir viviendo momentos como estos que son de pura felicidad. Es un sueño estar en el lugar que tanto luché por llegar ahí, así que ha aprovecharlo al máximo. Venimos trabajando muy bien y en lo personal muy contento por volver a la rutina, estoy enfocado y preparándome para cuando arranque el campeonato. Me estoy sintiendo muy bien, obvio que estamos en plena preparación, pero bastante bien. Me siento muy ansioso, esperando para ver cuando se vuelve y preparándome con todo”.
En tanto, Franco expresó: “Es una alegría inmensa poder renovar con el club que me abrió las puertas. Firmar junto a mi hermano es algo único. Desde que comenzamos a jugar al fútbol siempre fue nuestro sueño, compartir momentos juntos. Estar en el plantel profesional es algo único, te exige mejorar constantemente y estar compartiéndolo con mi hermano se disfruta cada vez más. En lo personal me siento muy bien, me estoy amoldando a los entrenamientos y preparado todos los días para aprender cosas nuevas. Creo que todos tenemos el mismo pensamiento de saber cuando vamos a volver a jugar, la ansiedad por volver es cada vez mayor”.